martes, 23 de octubre de 2018

BARDENAS REALES, 49k 200+



La idea inicial era hacer una circular de unos 40 kms según un track creado con el connect garmin y pasado al endomondo.


Pero al entrar en el centro de información del Parque Natural nos dijeron que ese día iba a haber maniobras en el campo de tiro y que iban a cerrar los caminos por los que pretendíamos ir.


Así que de entrada, y después de asomarnos al mirador de las Bardenas...:


...fuimos hacia el Castildetierra, que en mi plan lo había dejado como guinda final del recorrido.


Una vez allí, y como nadie cerraba el camino de la derecha, tiramos hacia el Este y nos llegamos hasta el cruce donde llega la pista que va directa al cuartel militar. En el cruce había una soldado gordita que no nos impidió seguir dando la vuelta al campo de tiro.


Cuando ya habíamos llegado al punto más oriental del campo de tiro, un vehículo de la policía militar nos cortó el paso y nos mandó para atrás. Decidimos entonces almorzar en una casucha cercana a una granja de ovejas.


Estábamos ya fumándonos el cigarrito del final del almuerzo cuando oímos un ruido seco. Bum, y salimos a mirar:

Coñooooó, qué cerca ha caído (!). Y al cabo de un rato, Bum, otro pepinazo

Ahí van ese par de angelitos...


Como parecía que se habían conformado con dos disparos, montamos en las bicis y arreamos hacia el cerro del cuartel militar donde ya nos sentimos más seguros. 

Pasando por otro "castildepiedra" cercano al cuartel militar 

Regreso al Castildepiedra más famoso 


Desde allí tiramos hacia Carcastillo hasta acercarnos a aquella montaña tan espectacular donde había un montón de coches franceses aparcados como si se hubieran ido todos a recorrer algún circuito peatonal.

De vuelta al Castildetierra, lo fotografié con el Moncayo al fondo



Fresquito inicial. Mucho viento de Noroeste. Coches y furgonetas caravanas, todos franceses, deambulando como vacas o dinosaurios de aquí para allá. Por suerte, el fuerte viento disipaba pronto las nubes de polvo. 

Entre que no pudimos dar la vuelta proyectada y esa forma tan primaria de explotación del parque natural, la verdad es que me sentí un poco decepcionado. Aunque debería darme por satisfecho porque... por lo menos ¡salimos vivos!


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